Algunos estámos desesperados por un empleo, pero esa no es razón para que publiquemos nuestros datos personales, correo, telefóno, y hasta otros mas senibles tan abiertamente.

Debemos recordar que en internet hay millones de personas, y no sabemos quien puede aprovecharse de nuestra nesecidad para estafar o usarpar nuestra identidad.

Si usted ve que alguien que hace una publicación de su interés en las redes sociales,  escribale a esa persona en privado, pués todo lo que coloque en vía pública será visible por todos, y esta información (mucha data personal que te pertenece), podría caer en las manos incorrectas, y hasta ser mal utilizada en tu contra.

Una práctica muy común hoy en día son las ofertas de empleos para oportunidades laborales internacionales, pero ojo, mucho cuidado aquí.

Nunca envies copia de tu Pasaporte, VISA, o cualquier documento que pueda ser usado para falsificar. Esta práctica esta muy común, visible en casi todos los grupos de empleos de facebook, publicaciones en Twitter relacionadas al sector laboral o otras redes sociales similares, asi como en la mayoría de páginas de empleos.

Aquí en DiarioEmpleo existe una política estricta en contra de esta mala práctica, y  se dispone de un equipo pro-activo de seguridad que verifica para identificar ese tipo de colocaciones laborales para su eliminación, pero en algún momento un estafador te podría engañar haciendose pasar como seguro y por tal razón nunca entregues infomación sensible como tu cédula, pasaporte o VISA sin antes estar muy seguro de la integridad y seriedad del empleador.

Por otro lado, no declares tantas cosas malas para ti mismo diciendo "este país no sirve", " todo aquí es por cuña/en llave". Yo no puedo tapar el sol con un dedo, hay que ser realista, yo sé que la piña está agria, como dicen, pero no pienses en todo lo negativo que te ha pasado continuamente, date un respiro.

Siéntate, analiza qué es lo que estás buscando a nivel laboral, si estás listo para tal puesto (y para esas personas que no han estudiado/graduado), no te quedes pensando en lo facíl, en lo más simple "¡Ay, yo quiero un trabajo y ya!".

Sobre todas las cosas, recomiendo poner a Dios por delante, y no de la boca para afuera, sino orando en verdad, como se debe. No solo nos dará fuerzas para volver a levantarnos luego de cada derrota, sino que estaremos de la mano del que todo lo puede, ese que crea estrellas solo con sus palabras.

Inspirado por ‎Marcos S. Díaz, editado por DiarioEmpleo.