Independientemente de la realidad laboral, conviene y es necesario dedicar tiempo, pasión, así como recursos para fortalecer tu participación y desempeño en la empresa donde trabajas.

Si bien es cierto que eres una pieza importante para el negocio en donde fuiste asignado, es importante recordar que todos somos reemplazables, y que todo lo hagamos debemos hacerlo como para Dios. La razón?... Veamos mejor los beneficios de esto:

1. Nos ayudará a mejorar nuestro perfil, y seremos ejemplos para otros.
2. Permitirá que preservemos el trabajo por más tiempo que otros.
3. No dejará una mala impresión y seremos recomendados.
4. Nos recordarán y estimarán. Saldremos por la puerta estrecha, la de la dignidad y respeto.

Hoy en día debemos asegurarnos de hacer un buen trabajo, no pensando en los otros, sino en uno mismo. Al final es a nosotros mismos que nos conviene hacerlo bien, pués no solo tenemos mejor ánimo cuando disponemos de un espíritu positivo, sino que hacer las cosas bien siempre tiene más beneficios que hacerlo negativamente.