Reinvéntate. Trabaja en lo que puedas, pero no dejes de buscar lo que quieras, aunque sea un minuto día a día.

Elige un camino: Define objetivos concretos para motivarte y comprobar tus avances.

Descubre: Si no conoces tus metas o pasiones, indaga alternativas y analiza tus intereses y competencias actuales.

Experimenta: Antes de decidir o invertir, da pasos pequeños. Experimenta y empieza actividades nuevas.

Especialízate: La vocación no se espera, se construye. Te puede interesar casi todo si le das la oportunidad.

Dedica tiempo: no esperes una chispa, piensa en llenar un embalse. Cuanto más conozcas una materia, más motivado estarás.

Haz networking: Si quieres consejos diferentes, pídelos a personas diferentes. El mejor networking, es más working que net.

Persigue tus pasiones: Haz más de lo que ya te gusta hacer, mientras haces lo que tienes que hacer, persigue tus intereses pero cumple tus obligaciones.

Aprende habilidades: Las profesiones cambian, las competencias permanecen. No pienses en títulos, piensa en habilidades, clientes y servicios.